por Gabriel Portell | Abr 24, 2015 | Marketing Digital, Web
Como si de un consejo del mismísimo Bruce Lee se tratase, Google ha puesto las pilas a todos las empresas y usuarios de páginas Web, ya que desde el pasado 21 de abril todos aquellos que no cuenten con un diseño adaptado a dispositivos móviles serán penalizados.
No es ningún secreto que en los últimos años los teléfonos móviles le han ido ganando terreno a los ordenadores a la hora de entrar en Internet y, por lo tanto, no es de extrañar que desde Google se hayan puesto serios con el tema. Muchas empresas desconocen los efectos negativos que esta decisión conlleva con respecto a su posicionamiento en el SERP de Google: empresas competidoras que hasta la fecha no aparecían por delante de ellas en las búsquedas de términos relacionados con su actividad, se verán favorecidas por contar con un diseño responsivo, y otras empresas óptimamente posicionadas, dejarán de aparecer en las primeras posiciones. Y si no estás allí, eres invisible. En Internet no basta con estar, tiene que ser sencillo poder localizarte.
Ahora bien, en el mismo paquete que vienen las ventajas encontramos los inconvenientes. Las empresas que viven de comercializar espacios publicitarios dentro de sus contenidos ven reducido el numero de posiciones publicitarias debido al diseño ‘responsive’, pudiendo llegar a caer sus ingresos hasta en un 15%. Aún así, Aquellos que no entren por el aro del RWD (Responsive Web Design), perderán posicionamiento respecto a otras webs que sí estén optimizadas, con lo que también tendrán un menor tráfico y, por ende, menores ingresos por venta de espacios. Comienza el dilema para decantarse entre los ingresos publicitarios o un mejor posicionamiento Web. Se masca la tragedia amigos.
Bromas aparte, la popularidad del diseño Web responsive está creciendo como la espuma y es por algo. Esta técnica supone grandes ventajas, sin ir mas lejos la de que con una sola versión en HTML y CSS se cubren todas las resoluciones de pantalla, por lo que el sitio Web queda optimizado para todo tipo de dispositivos y mejora la experiencia de los usuarios. De esta forma, se reduce el gasto de tener que mantener diseños de pantallas para diferentes dispositivos. Si nos adentramos en el mundo de las aplicaciones móviles, nuestros beneficios siguen aumentando ya que, tener un diseño optimizado, nos evita tener que desarrollar aplicaciones específicas para diferentes versiones móviles.
Si llegados a este punto ya estás totalmente convencido y quieres unirte a la larga lista de amigos ‘responsive’, comprueba de una forma sencilla si tu página ya está optimizada. Si la respuesta es negativa, ¡manos a la obra!
https://www.google.com/webmasters/tools/mobile-friendly/
por Gabriel Portell | Jun 1, 2013 | Marketing Digital, Publicidad, Web
Según el último estudio Nielsen Free to Move Between Screens realizado en marzo de 2013, el estadounidense medio dedica 41 horas a la semana consumiendo contenidos en pantallas.
Entre las conclusiones del informe se indica que las compañías que implementen en sus campañas de marketing las nuevas plataformas y espacios de internet conseguirán incrementar su impacto en un 20% respecto a los que no lo hacen.
El 70% de los responsables de marketing prevé incrementar la inversión publicitaria en nuevos soportes como redes sociales, video y móviles.
Mark Sneathen, Vicepresidente Senior en Nielsen, recomienda tres formas para optimizar la inversión en estos medios:
1. No confiar en una sola métrica para medir el éxito de una campaña. Por ejemplo, el porcentaje de clics no es aplicable a todas las campañas de publicidad.
2. Asegurarse flexibilidad en la adquisición de espacios digitales. Los resultados de una campaña pueden evaluarse en tiempo real. Si no está dando los resultados esperados, realizar ajustes inmediatos.
3. Definir objetivos claros para cada plataforma.
Estamos en un momento crucial. La tecnología, internet y la forma de acceder a la información están redefiniendo cómo los potenciales clientes llegan a conocer los productos. Al principio fueron los de gran consumo y hoy, los industriales.
por Alberto F. Carvajal | Abr 24, 2013 | Marketing Digital, Redes Sociales
Nos hacemos eco en Carvajal & Portell de los 9 errores de las empresas españolas en el uso del social media que Julián Villanueva y José Luis Orihuela identificaban después del estudio realizado sobre los medios sociales y la alta dirección en España.
Han pasado ya algunos meses desde su presentación en el IESE pero consideramos que son de plena vigencia:
Error 1. No hacer nada. Si tu marca es relevante, ya está en los medios sociales, aunque no quieras. Escucha y observa qué se dice de tu empresa. Y si decides estar presente, hazlo cuanto antes y será más sencillo conseguir seguidores.
Error 2. Estar de manera pasiva. Hay un número representativo de empresas que un día deciden tener presencia en alguna red pero que acaban desatendiendo el sitio o publicando noticias de escaso interés o muy mediocres.
Error 3. La estrategia en medios sociales no está alineada con la estrategia comercial y de marketing. Con frecuencia la alta dirección no entiende los nuevos canales de comunicación haciendo que se conviertan en algo residual, alejándolos de la estrategia comercial.
Error 4. Marketing y comunicación tampoco están alineados. La visión de la dirección comercial y la de marketing, ven la misma realidad de forma muy diferente.
Error 5. Demasiados objetivos. Si bien es cierto que los medios sociales permiten alcanzar varios objetivos simultáneamente, conviene identificar los principales hitos para evitar dispersarse.
Error 6. Sobre-estimar el impacto y la facilidad de llegar a los clientes. Aunque los directivos encuestados opinan que es más fácil obtener notoriedad en los medios sociales que en los tradicionales, lo cierto es que conseguir la atención de mis clientes requiere perseverancia e inteligencia.
Error 7. Presupuestos raquíticos. No asustan cifras abultadas cuando se habla de inversiones “off line”: el 90% dedica a online el 50% o menos y el 70% dedica a los medios sociales el 10% o menos del online.
Error 8. Cada uno entiende lo que quiere cuando se le pregunta qué es un “community manager”.
Error 9. Se dice que se quiere escuchar al cliente, pero luego no se mide la reputación online. Se denota cierta distorsión entre hacer una escucha activa de mi cliente y observar que se dice de mi empresa, qué reputación tengo.